La lluvia de meteoros Oriónidas, uno de los eventos astronómicos más esperados del año, estará activa entre el 2 de octubre y el 7 de noviembre. No obstante, el momento de mayor intensidad, cuando puede observarse con mayor facilidad, ocurrirá entre la noche del 21 y la madrugada del 22 de octubre.
Durante ese lapso, los cielos podrían registrar entre 15 y 20 meteoros por hora, en condiciones óptimas de observación. Aunque la cantidad no es comparable con lluvias más intensas, el brillo y la velocidad de las Oriónidas las convierten en un espectáculo digno de graficar en el firmamento.
¿Desde dónde y cuándo mirar?
Para observarlas en México, se recomienda dirigir la mirada hacia el cielo durante la segunda mitad de la noche, cuando la constelación de Orión ya aparece con claridad en el horizonte. Idealmente, la actividad será apreciable entre medianoche y las primeras horas de la madrugada, cuando el radiante —el punto del cielo del que parecen emerger los meteoros— está más alto.
Entre los estados mejor posicionados para verlas se encuentran aquellos alejados de la contaminación lumínica, con cielos despejados y horizontes amplios, especialmente hacia el este y sureste.
Recomendaciones para observación exitosa
- Escoge ubicaciones rurales o miradores alejados de luces urbanas para tener un cielo más oscuro.
- Llega con cierta antelación para que tus ojos se adapten a la oscuridad plena (idealmente unos 20 minutos sin luces fuertes).
- Evita utilizar aparatos como telescopios o binoculares: las Oriónidas se aprecian mejor a simple vista.
- Viste ropa cómoda y cálida, pues las temperaturas suelen descender por la madrugada.
- Consulta el pronóstico del clima la noche anterior, pues nubes o neblina pueden arruinar la visibilidad.
Un fenómeno con historia
Las Oriónidas están asociadas al cometa Halley, del cual se desprenden partículas que, al entrar en la atmósfera terrestre, se queman y generan los trazos luminosos característicos. A pesar de su apariencia fugaz, estos meteoros ofrecen una visión sobre la física del sistema solar y su material residual.
Para los aficionados a la astronomía, esta será una excelente oportunidad para captar destellos celestes en una noche despejada de otoño.