El Buró Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos informó sobre el desmantelamiento de una red internacional de producción de fentanilo que operaba en México y otras regiones, luego de alcanzar un acuerdo de cooperación con el gobierno de China para frenar el tráfico de precursores químicos utilizados en la elaboración de esta droga sintética.
El anuncio fue realizado por Kash Patel, director del FBI, quien explicó que el acuerdo con Beijing representa un avance clave en el combate contra el narcotráfico, al atacar no solo a los distribuidores, sino también las fuentes químicas que alimentan la producción del fentanilo.
Patel detalló que los precursores del fentanilo —componentes esenciales en su fabricación— habían sido obtenidos durante años por organizaciones criminales con relativa facilidad. Aunque Estados Unidos ha reforzado la captura de traficantes y distribuidores, “era necesario cortar el acceso directo a los ingredientes”, señaló.
Como parte del compromiso bilateral, China identificó y reguló 13 precursores químicos empleados en la elaboración del fentanilo y acordó supervisar siete empresas filiales dedicadas a su producción y exportación. Según Patel, estas medidas buscan eliminar la disponibilidad de los compuestos básicos en el mercado internacional.
El funcionario indicó que su reciente visita a territorio chino tuvo como propósito asegurar la implementación de estos controles. Con ello, afirmó, las organizaciones criminales con operaciones en México enfrentarán mayores dificultades para mantener su capacidad de producción.
El acuerdo entre Estados Unidos y China surge en un momento en que el fentanilo continúa siendo una de las principales causas de muertes por sobredosis en territorio estadounidense, donde autoridades de salud han calificado la crisis como una emergencia de salud pública sin precedentes.
















