Ayer, el mandatario estadounidense aseguró que sabía «exactamente dónde se esconde» el Líder Supremo de Irán.
«Es un blanco fácil, pero allí está a salvo. No vamos a eliminarlo (¡matarlo!), al menos no por ahora. Pero no queremos que se disparen misiles contra civiles ni soldados estadounidenses. Nuestra paciencia se está agotando», escribió en su red social.
El Líder Supremo de Irán, Alí Jamenei, rechazó este miércoles el llamado del Presidente de Estados Unidos (EU) a la “rendición incondicional” de Irán y prometió “mantenerse firme” ante lo que denominó agresión israelí. Donald Trump planteó la posibilidad de asesinar al Ayatolá Jamenei y se refirió a los esfuerzos bélicos de Israel con la palabra “nosotros”.
El involucramiento directo de Estados Unidos en la guerra, mientras otras potencias como Rusia y China guardan silencio, es cada vez más probable.
Esmail Baghaei, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, advirtió que cualquier intervención estadounidense sería “una receta para una guerra total en la región”. Le dijo a la cadena Al Jazeera que tal medida “sería extremadamente imprudente e irresponsable”. También sugirió que Irán permanece abierto a una solución negociada. “La diplomacia nunca termina”, afirmó, y añadió que en medio de los combates “nuestra diplomacia sigue en marcha”.
“Las personas inteligentes que conocen Irán, la nación y su historia, nunca le hablarán con amenazas porque la nación iraní no puede rendirse”, declaró el Ayatolá Jamenei en una declaración televisada el miércoles. “Los estadounidenses deben saber que cualquier intervención militar estadounidense sin duda traerá daños irreparables”.
La declaración, realizada en el sexto día de la guerra, se produjo apenas horas después de que Israel anunciara el lanzamiento de una nueva oleada de ataques contra la capital iraní. Durante la noche, el Ayatolá lanzó un desafiante llamado a las armas, afirmando en una publicación en redes sociales que “la batalla comienza”.
En una publicación en Truth Social el martes, Trump afirmó que Estados Unidos sabía “dónde se escondía” el Ayatolá Jamenei y que sus fuerzas no planeaban matarlo por ahora. El Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu, también ha hablado en los últimos días de un posible ataque contra el líder iraní.
El Ayatolá Jamenei, quien ha liderado Irán durante más de tres décadas y es una figura central de la política exterior iraní de línea dura, no abordó directamente las amenazas contra su vida en su declaración ni en redes sociales. Ha desempeñado un papel clave en posicionar a Irán como un contrapeso a la influencia estadounidense, israelí y saudí en Oriente Medio. El Ayatolá Jamenei también ha consolidado el control del aparato político, militar y de seguridad de Irán, y ha reprimido la disidencia para consolidar su posición como la máxima autoridad en la toma de decisiones del país.
