El Congreso acusó a los grupos feministas que protestaron la tarde de ayer de atacar su edificio sede e hizo  un llamado al diálogo.

En respuesta a las diversas notas informativas que se publicaron en torno a la represión de activistas que demandan la despenalización del aborto y el cumplimiento de compromisos asumidos por legisladoras y legisladores de Morena, la LX Legislatura rechazó haber utilizado gas lacrimógeno, como denunciaron algunas de las feministas reprendidas.

“La Cámara niega que haya utilizado ‘gas’ para repeler la agresión, como mencionan algunos tuits de medios de comunicación, porque el Legislativo ni siquiera cuenta con ese tipo de equipo y en realidad quienes sí esparcieron un gas y lo arrojaron dentro de la cámara fueron las propias manifestantes como muestran las imágenes (Fotos 1 y 2).

«En ese mismo orden de ideas, se informa que la lamentable lesión que sufrió una de las manifestantes se debió a que, al manipular una estructura de metal, cargarla y correr con sus compañeras, sufrió un accidente ella sola. (Foto 3)”, señala el comunicado del Poder Legislativo.

El Congreso Local también acusó a las colectivas de incurrir en acciones reiteradas por parte de activistas a las que califica de “personas violentas”, a la vez que hizo alusión a eventos previos en los cuales las manifestantes, incurrieron en acciones de presión ante la falta de respuestas de los y las legisladoras morenistas.

“Toda manifestación pacífica es bienvenida, pero acciones reiteradas por parte de personas violentas, como prender fuego a las puertas o la utilización de explosivos o armas blancas pone en peligro al personal y a las personas que caminan por las inmediaciones”, indicó.