Por sus expresiones que denigraban a la mujer, al referirse a ellas como “pirujas” o “nalguita”, la Secretaría de la Función Pública (SFP) informó esta tarde que José Manuel Mireles Valverde, subdelegado del Issste en Michoacán y exlíder de las autodefensas en ese estado, fue sancionado con una amonestación pública y suspensión de cinco días hábiles, tras utilizar de manera reiterada palabras despectivas y peyorativas en contra de derechohabientes y mujeres en general.

Diversas agencias informativas, entre ellas El Universal, reportan que en un comunicado, la dependencia federal detalló que la investigación se inició en septiembre de 2019, para determinar si el funcionario contravino el Código de Ética de las Personas Servidoras Públicas del Gobierno Federal al utilizar palabras denigrantes en dos eventos oficiales, realizados los días 4 y 9 de septiembre de ese año, en Apatzingán y Uruapan, Michoacán, respectivamente, por lo que se le sancionó con amonestación pública y una suspensión de cinco días hábiles.

“Nueva nalguita”

El 9 de septiembre de ese mismo año, Mireles Valverde fue grabado durante una reunión con personal médico de un hospital de Uruapan y en su discurso comentó que el líder sindical del Issste en la entidad, le pidió una plaza para “una nueva nalguita”.

La SFP recordó que el Código de Ética mandata brindar un trato igualitario a todas las mujeres y hombres, evitando cualquier menoscabo a la dignidad humana, los derechos y libertades o que constituya alguna forma de discriminación.

Estereotipos

“Asimismo, establece que las personas servidoras públicas deberán eliminar cualquier uso de lenguaje discriminatorio basado en estereotipos de género y fomentar una cultura igualitaria e incluyente”. 

La Función Pública aseguró que durante la investigación se garantizó el derecho de audiencia del servidor público, y en estricto respeto a sus derechos, indicó, la Secretaría respetará cualquier recurso que desee interponer ante las instancias correspondientes.

Derechos garantizados

“La Función Pública tiene como uno de sus propósitos fomentar una nueva ética, con perspectiva de género, en el servicio público, para garantizar la integridad y los derechos humanos de las mujeres, y hace un llamado a las personas servidoras públicas a cumplir con la obligación de observar disciplina y respeto hacia la ciudadanía durante el desempeño de sus funciones”, agregó.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *