Debido al temor a una sindemia e incluso la falsa creencia de que podría ayudar a evitar una infección de Covid-19, la demanda de la vacuna de influenza se ha triplicado, por lo que cientos de personas se forman fuera de los centros de salud para alcanzar una dosis.
De acuerdo con el gobierno del estado, 3.4 millones de dosis fueron repartidas en los centros de salud, sin embargo se teme que sean insuficientes para cubrir la demanda de los sectores vulnerables en una entidad con una población de 18 millones de habitantes.
Tan solo para el Valle de Toluca se destinarán 298 mil 700 dosis por lo que grandes y chicos hacen filas en los centros de salud, pues temen que se acaben y no puedan protegerse de lo que los especialistas llaman “sindemia” que será el encuentro de la influenza y el Covid-19.
La temporada de influenza del año pasado, que se reportó del el 29 de septiembre de 2019 y hasta el 14 de mayo de este año, dejó en el Estado de México un total de 318 casos y 18 defunciones.
“Que se apresure ahorita que están las vacunas para no tener aglomeraciones y después ya no hay, y ya está uno vuelta y vuelta y ya no hay, si se espera, pierde uno más tiempo, entonces ahorita que empieza hay que aprovechar luego luego, luego luego, hay que venirse a vacunar”, comentó Pedro Perea, taxista de 80 años que busca protegerse, sabe que la influenza podría complicarle la salud o matarlo.
El lema de la campaña de este año es “Por tu bienestar y el de tu familia”, ¡Vacúnense!”, pero se pide que las personas que presenten fiebre con más de 38 grados, que tienen síntomas de covid o que están tomando medicamentos inmunosupresores, no acudan, ya que puede ser contraproducente.
La campaña de vacunación dará preferencia a los niños de seis meses a 59 meses, los pacientes mayores de 60 años, también las embarazas y los pacientes que tienen alguna comorbilidad como diabetes, hipertensión, y el sector salud.