n épocas de pandemia, los delincuentes y coyotes hacen de las suyas. En redes sociales existen grupos o cuentas en los cuales se ofrece la realización de trámites vehiculares, como emplacamiento, verificación, tarjeta de circulación, licencias para conducir e incluso sacar vehículos del corralón.
Exhiben fotografías de placas, engomados o documentos oficiales, principalmente de la Ciudad de México, pero también del Estado de México, Morelos y Guerrero.
También se ofrecen para resolver gestiones complicadas. Incluso aseguran realizar trámites que oficialmente ya no existen, como la emisión de la licencia de conducir permanente para la Ciudad de México. Actualmente, este documento sólo se puede renovar, pero ya no emitirse por primera vez.
Otro trámite que aseguran realizar es la obtención de placas para personas discapacitadas. Estas matrículas permiten que los vehículos circulen todos los días.
Seguimos con más entregas de nuestros trámites, todos nuestros trámites son a contra entrega”, indica la usuaria Jeker Yabbnel en una publicación en el grupo Verificaciones y Trámites Vehiculares CDMX y EDOMEX CANTERA II.
Otros grupos son de carácter privado y sólo es posible unirse con autorización de los administradores.
Los detalles de las gestiones y precios sólo se ofrecen vía mensaje privado.
A la par, la Secretaría de Movilidad (Semovi) y la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) mantienen una campaña informativa en redes sociales para que los automovilistas eviten realizar sus trámites vehiculares con gestores.
Los cibercriminales solicitan por redes sociales un depósito para tramitar la licencia, sin embargo, en muchas ocasiones dan de baja sus perfiles o bloquean a su víctima, quien pierde dinero”, alertan.
Las dependencias agregan que los trámites por medio de redes sociales se prestan para que la ciberdelincuencia realice fraudes.
Al realizar un trámite fuera de Semovi la ciberdelincuencia se aprovecha de tu información y puede defraudarte financieramente. Si vas a tramitar tu licencia A por primera vez, renuevas o es reposición, acude a un Centro de Servicio de Tesorería”, indican en su campaña.
La Semovi y la SSC advierten que quien adquiere este tipo de documentación por estas vías se convierte en cómplice de un posible delito que se puede castigar con hasta ocho años de cárcel.
Debido a las condiciones generadas por la pandemia de covid-19, actualmente en la Semovi sólo se pueden realizar trámites de licencias, placas nuevas y altas foráneas. La Policía Cibernética señala que diario recibe 60 llamadas y 50 correos electrónicos, en promedio, denunciando fraudes vía redes sociales.
SE DICEN PACIENTES COVID-19
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) detectó una nueva modalidad de extorsión: los delincuentes llaman a los usuarios de telefonía haciéndose pasar por un familiar con covid-19 y piden un depósito bancario de entre 10 mil y 30 mil pesos para pagar un supuesto tratamiento médico.
Los extorsionadores también se hacen pasar por funcionarios públicos o vendedores de productos, como arcos sanitizantes, cubrebocas y gel desinfectante.
En esos casos llaman a empresas o negocios y exigen a los empleados el pagos de sus servicios, los cuales puede superar los 30 mil pesos.
Desde que se ha estado reportando la emergencia sanitaria por la pandemia es que se han recibido reportes, se ha desatado mucho la extorsión telefónica, con diversas modalidades, no solamente la de los pacientes con covid.
Otra modalidad de engaño a empleadas domésticas y empleados de oficina es que los extorsionadores se hacen pasar por alguna autoridad y piden el pago por servicios de arcos sanitizantes y productos sanitarios”, expuso Alfredo Almora García, director de Manejo de Crisis de Secuestro y Extorsión de la SSC.
Sin embargo, aseguró que hasta el momento la policía capitalina no tiene registro de casos que se hayan concretado al respecto, pero sí se han denunciado semanas después de que inició la jornada nacional de sana distancia, el 23 de marzo pasado.
La recomendación en general es mantener la calma cuando se viva este tipo de llamadas, valorar la situación y nunca ceder a las exigencias económicas o demandas del extorsionador; interrumpir la llama y verificar que ésta se realmente de algún familiar. Si no lo es, denunciar al teléfono 55 52 42 51 00.