Evitando la ruta de la reforma constitucional, tal como lo adelantó, el presidente Andrés Manuel López Obrador envió al Congreso de la Unión la propuesta para que, mediante reformas a leyes secundarias, la Sedena se haga cargo por completo de la Guardia Nacional, que tendrá como jefe un general y acceso a armas de uso exclusivo del Ejército, al tiempo, que según AMLO, seguirá siendo “civil”.

“El propósito de esta iniciativa no es militarizar al país o implantar el autoritarismo, sino cuidar, con la tutoría de la Sedena, el crecimiento sano de la que debe ser la principal institución de seguridad pública de México”, señala en la exposición de motivos el documento firmado por el mandatario, publicado este día en la Gaceta Parlamentaria.

Sin sorpresas, pues esta medida la detalló en diversas conferencias mañaneras, la propuesta pide que la Secretaría de la Defensa Nacional tome el control operativo, financiero y administrativo de la Guardia Nacional, a pesar de que constitucionalmente, dicha corporación debe seguir teniendo carácter civil. Se propone reformar los artículos 29, fracción IV, de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, y 12, fracción I, así como adicionar el artículo 13 bis, fracción I, de la Ley de la Guardia Nacional,

“La presente iniciativa tiene por objeto fortalecer la consolidación institucional de la Guardia Nacional como un cuerpo policial permanente, profesional y disciplinado, adscrito a la Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), bajo el control operativo y administrativo de la Secretaria de la Defensa Nacional (Sedena)”.

AMLO envió la propuesta antes del inicio del periodo ordinario de sesiones para que mañana mismo sea aprobada por la mayoría morenista en la Cámara de Diputados, dispensando todos los trámites.

Según la iniciativa, la medida es “para salvaguardar la vida, las libertades, la integridad y el patrimonio de las personas, así como contribuir a la preservación del orden público y la paz social, con respeto a derechos humanos y a los estándares internacionales en la materia”.

Se prevé también que el traspaso de mando se haga de manera pública en el desfile militar del 16 de septiembre.

En el documento se propone además que sea la Sedena la que proponga al presidente al jefe de la GN, que, al ser nombrado, adquirirá grado de General de División y Almirante.

A pesar de ello, se afirma que  la Guardia Nacional continuará su consolidación como institución civil adscrita a la SSPC, cuya función primaria es contribuir a la seguridad pública y desarrollará sus actividades con capacitación y adiestramiento, de naturaleza no bélica”.

Se indica que la GN recibirá presupuesto de la Secretaría de Seguridad Pública y de la Secretaría de Marina. Esto, a pesar de que el control administrativo quedará en la Sedena.

Asimismo, que la Sedena reorganice territorialmente el trabajo de la GN y que sus elementos no regresen a los cuarteles luego del 2024, sino que permanezcan en trabajo de seguridad pública.