En el municipio de Tultitlán, Estado de México, se llevó a cabo un operativo en el que las autoridades aseguraron una bóveda subterránea utilizada para almacenar drogas.
Este importante hallazgo fue dado a conocer por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) el pasado 30 de septiembre. En el lugar también fue detenido un hombre que ahora enfrenta cargos por delitos contra la salud, específicamente por narcomenudeo.
La bóveda, ubicada en la colonia Ampliación Buenavista Segunda Sección, contenía 20 botes con marihuana, cocaína y otras sustancias ilícitas, según el reporte oficial de la FGJEM. Este tipo de acciones reflejan los continuos esfuerzos por combatir el narcotráfico en una de las zonas más afectadas por la presencia del crimen organizado en el Estado de México.
El operativo, un hallazgo subterráneo
Durante el cateo, en el que participaron fuerzas de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) y la policía local de Tultitlán, se inspeccionó a fondo la propiedad. Lo que sorprendió a los agentes fue la bóveda subterránea que contaba con puertas metálicas de seguridad. Aunque las dimensiones exactas no fueron reveladas, la estructura fue diseñada para ocultar grandes cantidades de estupefacientes.
El detenido fue trasladado a las instalaciones de la FGJEM y se le acusa de narcomenudeo, aunque las autoridades no han precisado la cantidad total de drogas incautadas. Las investigaciones siguen abiertas para determinar si esta bóveda está vinculada a algún cártel de drogas que opere en la región.
¿Tultitlán es un nuevo foco de narcotráfico?
Tultitlán es un municipio donde se han detectado operaciones de grupos criminales como «Los Peluches» y «Nuevo Imperio», este último vinculado al Cártel de Sinaloa. La presencia de estas organizaciones delictivas en la región ha convertido al Estado de México en un punto clave para el almacenamiento y distribución de drogas, afectando tanto a comunidades locales como a ciudades cercanas, incluida la Ciudad de México.
Aunque la fiscalía no ha confirmado si la bóveda subterránea estaba directamente relacionada con estos grupos, la creciente presencia del crimen organizado en Tultitlán y municipios aledaños sugiere que este podría ser otro caso de narcotráfico vinculado a organizaciones mayores.