“El que tolera el desorden para evitar la guerra, tiene primero el desorden y después la guerra”.
-Maquiavelo.

Hamás e Israel son dos actores que desempeñan actualmente un conflicto de larga data que involucra disputas territoriales, religiosas, políticas y culturales en la región de Oriente Medio. El objetivo: desaparecer el estado de Israel.

Hamás es un movimiento de resistencia islámico que inició en 1987, ha sido declarado como una organización terrorista por varios países y organizaciones internacionales, incluidos los Estados Unidos y la Unión Europea. Ha estado en conflicto con Israel en repetidas ocasiones, lo que ha llevado a enfrentamientos militares y crisis humanitarias en la Franja de Gaza.

El terrorismo es perjudicial para las sociedades y comunidades en todo el mundo, ya que resulta en la pérdida de vidas humanas, incluyendo víctimas inocentes, lo que es una tragedia inmensa para las familias afectadas y la sociedad en su conjunto.

Por su parte, Israel -tiene todo el derecho a defenderse y vivir en paz- considera la seguridad nacional como una prioridad fundamental debido a las amenazas de Hamás y otros actores de la región. Mantienen un fuerte ejército y medidas de seguridad para proteger su territorio y población.

El conflicto entre Hamás e Israel ha llevado a varios enfrentamientos militares a lo largo de los años, con un alto costo en vidas humanas y daños materiales. La búsqueda de una solución pacífica sigue siendo un desafío importante, los esfuerzos de mediación y los llamados a un alto al fuego son continuos, pero la situación sigue siendo altamente inestable.

Quiero resaltar que la paz no es un lujo, es una necesidad; no es un sueño inalcanzable, es un objetivo que todas y todos debemos abrazar y perseguir. Vivimos en un mundo que, en ocasiones, parece estar marcado por la división, el conflicto y la discordia. Quiero recordarles que somos seres humanos con la capacidad de comprender, dialogar y resolver nuestras diferencias de manera pacífica.

La paz no sólo es la ausencia de guerra, sino la presencia de justicia, igualdad y respeto por los derechos humanos. Debemos condenar el terrorismo y reprobar los ataques en contra de cualquier país.

X: @AlejandroDíazDz
Estudiante de Derecho en la Universidad Autónoma del Estado de México.