México envió a un grupo de 70 inmigrantes haitianos, incluidos 13 niños, en un avión a Puerto Príncipe, en lo que el gobierno dijo que era parte de un “retorno voluntario asistido” a Haití.

En un comunicado conjunto el miércoles, los ministerios del Interior y de Relaciones Exteriores de México dijeron que el vuelo se realizó como parte de un acuerdo entre las autoridades mexicanas y haitianas para gestionar un aumento en el número de solicitantes de asilo haitianos que se desplazan a través de México hacia Estados Unidos.

Los ministerios agregaron que decenas de migrantes haitianos llegaron a la Ciudad de México (CDMX) y el cercano Estado de México (Edomex), así como en los estados de Hidalgo y Tabasco. 

El anuncio se produce después de que un grupo de más de 14.000 migrantes, la mayoría de ellos haitianos, cruzaran el Río Grande desde México hasta Del Rio, Texas, donde establecieron un campamento improvisado debajo de un puente. Es importante señalar que los migrantes haitianos esperaron bajo el puente de Texas en condiciones miserables

La administración del presidente estadounidense Joe Biden ha expulsado a más de 4.600 solicitantes de asilo haitianos de regreso a Haití en 43 vuelos, dijo a CNN un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos el miércoles.

Miles más permanecen bajo la custodia de la Patrulla Fronteriza y de Aduanas de Estados Unidos, donde la mayoría espera la expulsión. 

Las expulsiones han generado una condena generalizada de los defensores de la inmigración, así como de los miembros del propio Partido Demócrata de Joe Biden, que argumentan que los solicitantes de asilo no deben ser obligados a regresar a un país políticamente inestable acosado por la violencia y los desastres naturales.

Grupos de derechos humanos y un destacado experto de las Naciones Unidas han advertido que las expulsiones de los migrantes provenientes de Haití desde México y Estados Unidos podrían violar derechos internacionales.