El cometa 3I/ATLAS se ha convertido en el objeto celeste más intrigante de la temporada, capturando la atención de la comunidad científica y desatando una ola de especulaciones sobre su naturaleza y origen. Ante sus características anómalas y su procedencia interestelar, la NASA ha activado oficialmente el protocolo de Defensa Planetaria para su monitoreo.
La medida fue confirmada mediante un boletín oficial publicado como circular electrónica por el Minor Planet Center de Harvard (MPEC 2025-U142), poniendo en marcha una campaña de observación coordinada a nivel global.
El Misterio del 3I/ATLAS: ¿Cometa o Nave Espacial?
La principal razón de la preocupación y el seguimiento exhaustivo es el origen del 3I/ATLAS: es un objeto interestelar, lo que significa que proviene de fuera de nuestro Sistema Solar, un fenómeno poco común que siempre genera un alto interés científico.
Sin embargo, las especulaciones han escalado a nivel mundial debido a varias anomalías observadas en el cometa, como el Brillo Inusual delantero que los expertos han calificado de extraño.
También la Trayectoria Precisa: Sigue un curso extremadamente exacto, atípico para la mayoría de los cometas y la intensidad Lumínica: Su luz es tan alta que se ha comparado con la intensidad de una fuente nuclear compacta.
Estas características han llevado incluso al astrofísico de Harvard, Avi Loeb, a sugerir que el 3I/ATLAS podría no ser un cuerpo natural, sino una «nave espacial tecnológica», intensificando el debate científico global.
¿Qué Implica la Activación de la ‘Defensa Planetaria’ de la NASA?
La activación del protocolo de Defensa Planetaria (Planetary Defense) no implica una alarma inminente de impacto, sino la puesta en marcha de una estrategia rigurosa de vigilancia global.
Este protocolo forma parte de las operaciones de la Red Internacional de Alerta de Asteroides (IAWN), cuya función es monitorear y evaluar objetos cercanos a la Tierra (NEOs) que puedan representar algún riesgo.
Coordinación Científica Global
La activación formal de la IAWN se traduce en una campaña de observación coordinada entre la comunidad científica mundial. Sus objetivos principales son:
- Recopilación de Datos Precisos: Obtener mediciones exactas sobre la posición y las características del 3I/ATLAS.
- Mejora de la Astrometría: Debido a que la cola gaseosa de los cometas dificulta las mediciones precisas, la IAWN organiza talleres y teleconferencias para asegurar que los datos sean comparables entre distintos observadores.
El calendario de seguimiento detallado se extenderá desde finales de noviembre de 2025 hasta finales de enero de 2026, para asegurar que el comportamiento y la trayectoria del cometa sean plenamente comprendidos.
Sin Riesgo de Impacto, por Ahora
A pesar de la activación de la Defensa Planetaria y las especulaciones sobre su naturaleza, la NASA no ha informado hasta el momento sobre ningún riesgo de impacto del cometa 3I/ATLAS.
Aunque el cometa alcanzará su punto más cercano al Sol (perihelio) el próximo 29 de octubre, el protocolo se mantiene activo como medida de precaución científica para desentrañar el misterio de este fascinante visitante interestelar. La comunidad científica insiste en que el objetivo principal es realizar estudios adicionales para confirmar su comportamiento y descartar cualquier amenaza potencial.















