Desde la bancada del PRI respaldaron la propuesta de solicitud de nueva deuda por mil 500 millones de pesos en el proyecto de Paquete Fiscal 2023, pues se aclaró que el Estado de México tiene capacidad económica y el gobierno estatal es conservador. 

El vicecoordinador de dicho grupo parlamentario, Enrique Jacob Rocha fijó postura en el tema y recordó que este mecanismo también fue ejercido por el gobierno federal en el presupuesto para el siguiente año del país.

PRI defiende solicitud de nueva deuda en Edomex

En entrevista, el diputado local resaltó que el gobierno estatal hace una propuesta razonable de un nuevo crédito y parte porque tiene capacidad financiera para ello. Y en su caso particular, no lo ve mal. 

Resaltó que, aunque se deben revisar las propuestas de las obras, el financiamiento lo que permite es adelantarlas para obtener beneficios a corto plazo. Y cuestionó la postura que el año pasado emitió Morena donde la rechazaba porque no les gustaba. 

“Creo que un monto de mil 500 millones de pesos es muy razonable de acuerdo a las capacidades que tiene el Estado de recurrir al financiamiento”, indicó.

Jacob Rocha destacó que, durante los cinco años de la presente administración, ha sido una constante el tener capacidad financiera, que ha sido validado por las calificadoras.

La entidad tiene solvencia y sostenibilidad financiera

Recordó que bajo la calificación obtenida el Estado ha permitido a tener un costo de financiamiento más favorable, es decir, con menores tasas de interés.

“Está siendo como debe de ser el gobierno del Estado conservador yo creo que esto es un gran activo, es un gran atributo y que bueno que así sea y esto evita que vayamos a tener algún tipo de sorpresa en el transcurso del año”, insistió.

De acuerdo a la Secretaría de Finanzas (SF) la entidad tiene solvencia y sostenibilidad financiera, pues su capacidad para adquirir deuda es de hasta 30 mil millones de pesos, pero no se ha utilizado. 

Además, aclaró que todos los financiamientos que pueden adquirir los gobiernos, incluido el mexiquense, únicamente se utilizan para inversión pública productiva, es decir, infraestructura, más no para gasto corriente, programas o acciones.