En nombre del grupo parlamentario de Morena dijo que con esta medida se busca reformar la Ley de Competitividad y Ordenamiento Comercial, la ley Orgánica Municipal y el Código Administrativo, además, propuso sancionar, suspender o cancelar los establecimientos que comercialicen dicho licor con características de color azul que enmascaran el sabor y elevan los niveles de excitación, derivado de los ingredientes que la componen.
La propuesta argumenta que estas bebidas pueden causar una falsa sensación de sobriedad, lo cual se traduce en daños severos a la salud, como intoxicaciones graves, arritmias, miocardiopatías e inclusive la muerte súbita, además aumenta el riesgo de accidentes y complicaciones graves, pues los consumidores creen ser capaces de conducir vehículos o tomar decisiones que pueden poner en riesgo su vida y la de terceros.
Al detallar en los efectos de los azulitos, acotó: “Estudios recientes revelan que los también conocidos como pitufos tienen efecto directo al organismo, siendo el más común una intoxicación hepática que tiene síntomas como dolor de cabeza, dilatación de las pupilas, vómito, taquicardia, hipertensión arterial, entre otras”.
La legisladora recalcó que tienen la obligación de incorporar preceptos normativos que beneficien a todas y todos, garantizando sus derechos a la salud y contribuyendo a su bienestar, por lo que “el su consumo contribuye a 3 millones de muertes anuales a nivel mundial, mientras que a nivel nacional, cada año fallecen 24 mil personas en accidentes, siendo nuestro país el séptimo lugar mundial en decesos por esta causa”.
Alertan sobre su consumo excesivo
El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) emitió recientemente una alerta sobre los peligros del consumo excesivo de azulitos, bebida alcohólica popular entre los jóvenes.
El famoso tónico combina vodka, refresco y bebidas energéticas endulzadas con gomitas o chamoy, lo cual esconde los efectos del alcohol que pueden generar abuso en su consumo y ocasionar consecuencias.
Entre las consecuencias se encuentra el incremento en el riesgo de obesidad, diabetes, aumento de glucosa e incremento de la presión arterial, ya que un litro puede tener hasta 730 kilocalorías.