Los diputados de Morena en el Congreso del Estado de México propusieron reformas que buscan fijar reglas claras para evitar abusos en el servicio de grúas y corralones.
En sesión plantearon reformar diversos ordenamientos, para entre otras cosas, determinar el área geográfica de operación de los servicios auxiliares de arrastre, salvamento, guarda, custodia y depósito de vehículos, que se presten por diversos permisionarios o concesionarios.
Lo anterior pues “muchas veces es mayor el cobro de tarifa por la prestación de este servicio que el precio de vehículo, por eso está propuesta busca atender la problemática generada en la prestación de esos servicios”, dijo el diputado promovente, Adrián Manuel Galicia.
Mencionó que en el Estado de México existen grupos que, de manera inmoral, lucran y abusan de su función administrativa, y se aprovechan de las necesidades sociales y las problemáticas de las personas al detectar vacíos jurídicos, como es el caso de los servicios concesionados y permisionados de arrastre, salvamento, guarda, custodia y depósito de vehículos.
La propuesta dice que para coordinar de manera armónica la prestación de dichos servicios, la Secretaría deberá establecer los roles de servicio, su vigilancia y operatividad en las zonas de operación en que presten sus servicios más de un permisionario o concesionario de los servicios auxiliares de arrastre, salvamento, guarda, custodia y depósito de vehículos, respectivamente.
Además, que se harán de conocimiento dichos roles de servicio a la Secretaría de Seguridad y nadie podrá, al amparo de una misma concesión, prestar el Servicio Público Auxiliar de Guarda, Custodia y Depósito de Vehículos en más de un inmueble.
El legislador agregó que “la carente infraestructura para la administración y promoción de cultura vehicular, la sospechosa falta de control sobre los vehículos automotores ingresados a los depósitos de vehículos, la absoluta opacidad en los cobros de los servicios brindados por los mismo, los robos de autopartes que se perpetran al interior de estos espacios, entre otras artimañas; ponen en duda si es un servicio a la ciudadanía o un atraco; pues en algunos casos es mayor el cobro de la tarifa que incluso el propio valor del vehículo”.