Las muertes por homicidios en México durante 2022 alcanzó el total de 32 mil 223, de las cuales 27 mil 839 fueron de hombres, 3 mil 800 de mujeres y en 584 casos no se especificó el sexo de la víctima, reveló el INEGI a través de las estadísticas preliminares de enero a diciembre de 2022 sobre este delito en el país.

En el caso particular del Estado de México, se registró un aumento en 2020, 2021 y 2022, sumando en los tres años 9 mil 434 casos, no obstante, Guanajuato es la entidad con el mayor acumulado en todo el país en el periodo acumulado, con 13 mil 959 decesos.

Las cifras muestran que en la entidad mexiquense en 2022 se registraron 3 mil 226, en 2021 fueron 3 mil 119 y en 2020 fueron 3 mil 089, cifras que posicionan al Estado de México como la segunda entidad con mayor cantidad de casos en los últimos tres años.

La primera posición fue para Guanajuato, que en 2020 registró 5 mil 370 homicidios, en 2021 un total de 4 mil 333 y en 2022 fueron 4 mil 256.

Pese a los datos anteriores, al hacer el comparativo de tasa de homicidios por cada cien mil habitantes por entidad federativa, Colima fue la entidad que ocupó el primer lugar con 113 en 2022, en 2021 fue Zacatecas con 109 y Colima en 2020 con 95.

De 2011 a 2022, el año que mayor cantidad de homicidios registró la entidad mexiquense fue 2013 con 3 mil 311, y el de menor incidencia fue 2011 con 2 mil 623 casos.

En México, la agresión con disparo de otras armas de fuego y las no especificadas fueron la principal causa de muerte de las víctimas de homicidio, con un total de 21 mil 547 muertes, de las cuales 19 mil 317 fueron de hombres y 2 mil 178 de mujeres en 2022.

La segunda causa de muertes por homicidios en México fueron las agresiones por medios no identificados con 4 mil 257, seguido de las agresiones por objetos cortantes con 3 mil 131 y las agresiones por ahorcamiento, estrangulamiento y sofocación con 2 mil 378.

Las cifras preliminares de 2022 del INEGI se derivan de las Estadísticas de Defunciones Registradas que provienen de los registros administrativos de defunciones accidentales y violentas que generan las entidades federativas.