El expresidente estadounidense y candidato republicano Donald Trump acusó a México de aprovecharse de la relación comercial con Estados Unidos y afirmó que utilizaría el cierre de la frontera como una herramienta de negociación para abordar la importación de vehículos.
En un mitin en Howell enfocado en la delincuencia y la seguridad, Trump criticó a Kamala Harris, su rival en la carrera presidencial, y aseguró que impondría aranceles de entre 100% y 200% a los autos fabricados en China y vendidos en Estados Unidos a través de México.
Trump afirmó: «México está tomando ventaja de Estados Unidos, ellos quieren miles de millones de dólares solo para hablar. Ellos no dirán eso conmigo». Además, propuso que si México no accede a sus demandas, Estados Unidos no comerciará con el país ni permitirá la venta de autos fabricados en fábricas chinas instaladas en México.
En su discurso, Trump también abordó la necesidad de una frontera segura y una policía fuerte, prometiendo ofrecer a los estadounidenses «cumplimiento de la ley, seguridad y paz» si gana en las elecciones del 5 de noviembre. Reiteró su compromiso de cerrar la frontera en su primer día en la Casa Blanca y de deportar a los migrantes que crucen de manera irregular.
«Queremos que llegue gente, pero que lo haga de forma legal. Mandaré a los (migrantes) ilegales de Kamala de vuelta a casa, que es donde pertenecen», destacó Trump, añadiendo que aumentará los fondos para las fuerzas de seguridad y que el crimen en Estados Unidos está «fuera de control».