Dos senadores estadounidenses reprendieron el jueves al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, por recibir al mandatario venezolano, Nicolás Maduro, en la reciente cumbre de la Celac y no extraditarlo a Estados Unidos, donde es requerido por narcotráfico.

En una carta, los republicanos Marco Rubio y Rick Scott, senadores de Florida, también reprocharon a López Obrador haber acogido al jefe de Estado cubano, Miguel Díaz-Canel, para las celebraciones del bicentenario de la independencia de México.

«Esperamos que su decisión de recibir al narco-dictador Nicolás Maduro y al títere de la dictadura cubana Miguel Díaz-Canel no sea indicativo de un alejamiento de los principios de su país en el respeto por la democracia y la libertad», escribieron.

Rubio, de origen cubano, y Scott consideraron que López Obrador incumplió compromisos internacionales sobre crimen organizado trasnacional al no detener a Maduro cuando asistió a la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), realizada en la Ciudad de México el pasado 18 de septiembre.

Recordaron que el 26 de marzo de 2020, el Departamento de Justicia estadounidense imputó a Nicolás Maduro de «narcoterrorismo» y tráfico de drogas a Estados Unidos, y subrayaron que hay «evidencia» de que supervisó el tránsito de narcóticos a través de México.

«Maduro debió haber sido extraditado a Estados Unidos para enfrentar un juicio por estos cargos tan pronto como pisó suelo mexicano», sostuvieron Rubio y Scott, remarcando que México firmó la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional de 2000.

El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, recibió personalmente en el aeropuerto a Maduro, quien realizaba su primer viaje oficial desde que fue inculpado por la justicia estadounidense.

El gobierno de Estados Unidos ofrece 15 millones de dólares de recompensa por la captura de Maduro.

Invitado de lujo

Rubio y Scott también cuestionaron a AMLO, como se conoce al presidente mexicano, por tener como invitado de honor de los festejos independentistas a Díaz-Canel, quien también participó en la cumbre de la Celac.

«Por más de seis décadas, los hermanos Castro y ahora Díaz-Canel, han oprimido al pueblo de Cuba», señalaron, resaltando las «históricas protestas» que estallaron el 11 de julio en la isla.

«El optar por otorgarle legitimidad a este régimen antidemocrático es una falta de respeto a la lucha del pueblo cubano por su libertad y también opaca el simbolismo histórico del Grito de Dolores», dijeron, en alusión al acto de septiembre de 1810 que dio inicio a la independencia de México de la Corona española.

Durante la visita de Díaz-Canel, AMLO manifestó que esperaba que su par estadounidense Joe Biden «actúe con grandeza» y ponga fin a las políticas contra Cuba, especialmente el embargo económico.